Javier Bardem no sabe lo que firma
¿En qué se parecen Javier Bardem y la exinfanta Cristina? El título lo dice claramente; el uno por despiste y la otra por amor, no se dieron cuenta de lo que firmaban. Javier Bardem firmó la declaración, junto con Penélope Cruz y otros representantes de la cultura española “para denunciar el genocidio al que el pueblo israelí somete a la población civil palestina”, a la vez que instaban a la UE “a condenar los bombardeos por tierra, mar y aire sobre la franja de Gaza”.
En breve hubo rectificación, la cual suavizaba la contundencia del mensaje “a favor de un deseo de paz en ambos bandos, porque no somos antisemitas”.Mucho más beligerante se ha mostrado Javier Bardem a la hora de defender a la población saharaui de Marruecos y de aliados europeos. Firme defensor de un territorio propio para los saharauis, así como de sus derechos como población civil, no ha dudado en pedir apoyo internacional en alguna gala de los Goya pidiendo que “no les abandonemos”. Será porque Hollywood está financiado por dinero procedente de las arcas de judíos sionistas, palabra que debería haber utilizado en vez de antisemitismo, y que le merece más respeto, así como su presidente Barack Obama, que con una mano condena y con la otra vende armas a Israel para ganarse al lobby judío en EEUU.
Y es que, aunque la muerte nos iguale por abajo, el conflicto presenta rasgos ideológicos y bélicos que precisan que la población mundial se involucre; el historiador Slohom Sand, judío emigrante en EEUU, dijo que el pueblo judío era el resultado de una violación de la población árabe y así es, pero es también un niño nacido de una violación cometida en la 2ª Guerra Mundial y del ascenso del nazismo en Alemania. El sionismo autoritario es el resultado de esa dictadura fascista y xenófoba y los europeos tenemos muy mala conciencia de esa parte de la historia porque esa “violación” ocurrió en Europa. Ahora son los judíos occidentales, aquellos que fueron en busca de un territorio donde conformar su Estado, los que cometen las mismas atrocidades que Javier Bardem y Penélope Cruz relativizan en su rectificación y que son bendecidas por americanos como Jon Voight http://elpais.com/elpais/2014/08/04/gente/1407152040_755163.html; el judío autóctono, de raíz árabe y socialista, abogaba por la integración. Y a EEUU le viene muy bien una raza sionista autoritaria y capitalista que contrarreste al mundo árabe en esa eterna lucha de bloques que no finalizó con la 2ª Guerra Mundial. Y es por eso por lo que el Derecho Internacional Humanitario rechaza las acciones militares, que no policiales, de Israel sobre Gaza; porque si Gaza bombardea Israel, Israel no tiene por qué contestar con la defenestración de objetivos civiles, auténticas víctimas de este conflicto. Y denunciar las acciones militares contra los civiles palestinos es ser antisionista, no antisemita.